La obra incluye el soterramiento de los viales de acceso a la Plaza de Cruces, así como de los autobuses, un aparcamiento subterráneo de seis plantas que da servicio a los vecinos y al Hospital, y la urbanización en superficie del conjunto.

 

La complejidad estructural resulta de la superposición geométrica del programa de necesidades, y del ensamblaje de las diferentes formas y luces.